Hoy termina el plazo para la inscripción de las listas de candidatos de los partidos políticos y las agrupaciones de electores para las próximas elecciones autonómicas y municipales. Y en multitud de ellas aparecerán candidatos imputados en procedimientos judiciales, sin que ninguna ley o código ético de los partidos lo impida.
El hecho de estar imputado supone que un juez ha admitido a trámite una demanda y ha apreciado indicios de delito. Respetando la presunción de inocencia -aplicable también a los políticos-, es dificil entender por qué y para qué se incorporan imputados en las listas electorales.
Se me ocurren varias razones: 1/ para dificultar la labor de la justicia, 2/ para intentar que los electores hagan justicia por medio del resultado electoral, cuando la justicia no debe ser democrática, 3/ en el caso de los parlamentos regionales para aforar a los imputados electos, 4/ porque los aparatos de los partidos políticos se mueven en el tráfico de la corrupción con naturalidad y 5/ porque algunos imputados se incorporan directamente a las listas ya que son ellos mismos los que las confecionan.
No parece ético ni estético que candidatos bajo sospecha y con escasa ejemplaridad se presenten a las elecciones pero para ellos es "natural". Y así a la lista de Camps en Valencia, a la de IU en el ayuntamiento de Sevilla, pueden ustedes sumar cuantas conozcan, y seguro que tienen una cercana a mano.
Aquí cerca, y hace ahora un año de ello, llegó el secretario regional de organización del PSOE para entrevistarse con el presidente de la Junta Vecinal de Bolmir. A esa reunión se sumaron el alcalde y teniente de alcalde del ayuntamiento,y un vecino.
El objeto de la reunión -no anunciado con antelación- era el intento de conseguir retirar una demanda penal [delito ecológico, delito urbanístico, prevaricación, falsedad en documento público] en la que están imputados los 4 concejales PSOE y el alcalde.
No se trataba de hablar de los asuntos del pueblo ni de su gestión, tampoco preocupaban los contencioso-administrativos interpuestos. Confundiendo lo público con el partido político y este con los intereses privados se utilizaba el Salón de Plenos del Ayuntamiento, y durante tres horas y media, con el exclusivo fin de que se retirase el pleito penal. Mi información es de primera mano.
El pleito penal no se retiró, el contencioso administrativo sobre el mismo asunto se ha ganado según parece aunque el presidente de la junta vecinal no ha informado de todo ello a los electores quizás haciendo gala de esa necesaria "normalidad democrática" posterior a su pase a la lista PP desde la lista PSOE.
Y por supuesto el alcalde imputado se presenta por enésima vez supongo que con parte del resto de los imputados. El secretario de organización referido está imputado por varios delitos de prevaricación de su etapa de alcalde de otro ayuntamiento de los de Cantabria.
La Guinda: A la Justicia lenta hay que añadir la particular lentitud con la casta política, y el acomodo de los tiempos en los procesos a la agenda electoral del año. Por último recordar las inefables y recientes manifestaciones del secretario de organización de otro partido: "de nada sirve buscar candidatos honrados si no atraen votos"
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