Es dificil que las obras que dependen de los políticos se acaben en tiempo y no presenten inconvenientes en su ejecución. Es el caso de la carretera de Bolmir a Arija, en Arroyo. Así lo cuentan en eldiariomontanes.es:
"Si queremos tener unos buenos accesos, antes tenemos que sufrir los inconvenientes de las obras, pero esta actuación, parece que la están ejecutando para fastidiarnos", esta es la opinión generalizada de los vecinos del municipio campurriano de Las Rozas de Valdearroyo, en declaraciones exclusivas a eldiariomontanes.es, cuya carretera, que discurre paralela al Pantano del Ebro, se está acondicionando de forma muy lenta, con obras que no se acaban en un tramo y arrancan en otro. "Además, han levantado el pavimento en el casco urbano de Arroyo y tenemos que andar por las calles en albarcas o katiuscas, pues todo es un barruscal", manifiestan.
El portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Las Rozas de Valdearroyo, Carlos Lantarón, califica esta actuación como de “despreocupación y abandono” de la Consejería de Obras Públicas por la carretera Bolmir-Arija. Una obra que, según recordó, “se inició con varios años de retraso y cuya ejecución va a paso de tortuga”.
“Son 20 Kilómetros que demuestran la falta de voluntad política de un Gobierno por dotar de servicios esenciales a sus ciudadanos”, continua Lantarón, quien consideró que el Gobierno “tiene abandonada a una población que debe soportar incomodidades y circunstancias a menudo bien difíciles, agudizadas en invierno y por los temporales”.
Según indicó Lantarón, la citada carretera se encuentra “en un estado absolutamente lamentable, impracticable para los automovilistas y con evidente riesgo y peligro para su seguridad”. Transcurrido más de un año desde que se iniciaron las obras, continuó, “el pueblo de Arroyo está totalmente levantado y todavía más de la mitad del trazado ni siquiera tiene echada la primera capa”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario